miércoles, 29 de enero de 2014

Unsaid Things

De la escéptica al mundo.

¿Es realmente malo para la conciencia de alguien no creer absolutamente en nada? ¿Es un error filosófico? ¿Mi ideología es tan equivocada? Porque yo supongo que, en algunas esquinas del mundo, debe haber más gente como yo. Aquellos que no creen en nada, y cuando digo nada me refiero a nada en absoluto. No fantasmas ni espíritus ni ángeles ni religión alguna. Olvidense de las fuerzas misteriosas que obran en nombre del Universo y de los familiares muertos que nos cuidan.
Pero no, los que me leen deben creer que soy una persona cerrada de mente, pesimista o desesperanzada, pero no. Me cuesta y siempre va a ser un sacrificio para mi creer en el más allá, en asuntos metafísicos. Lo que no me cuesta nada es detestar al hipócrita mediocre que dice: "Cuando te toque atravezar un momento difícil no te va a quedar otro remedio y vas a terminar pidiéndole favores a cualquier dios". Lo dudo mucho, sinceramente, no creo que haya algo más. Uno está sólo en el mundo, es natural que se inventen compañias para no volverse locos ni angustiarse. Pero capaz, quizas, mi persona no necesite esas cosas sobrenaturales para vivir o tal vez sea que ya estoy loca...


























No critíco a la gente que si piense que existan, por mi que crean que su dios es un simio. Esto es puramente propia opinión.

Now listenin': Big Me - Foo Fighters

No hay comentarios: